Callar, ya sea por no tener nada que decir, por no saber como empezar, por no meter la pata, por no molestar, por no mentir...a veces es bueno callar, pero no siempre es la mejor solución. La verdad es que debería aplicarme en eso de no callarme e intentar meter la pata o molestar. A veces, es la única manera de recuperar algo que parece perdido totalmente, algo que sólo queda en tu recuerdo, cada día, aunque no lo digas, está ahí.
En cuanto a las mentiras, a veces hay quien se cree las suyas, y piensan que repitiendo mucho esa mentira puede convertirse en error. A veces, te mienten aun sabiendo que tu sabes la verdad. ¿Qué hacer? ¿Seguirle el juego de mentiras? ¿Ver hasta donde llega la imaginación humana? ¿Poner a prueba la teoría de esa realidad basada en la mentira?
En cuanto a los silencios, hay algunos que son difíciles de romper, y cuanto más tiempo pasa más fuerte se hace, eso es lo que provoca la distancia, no los kilómetros. ¿Cómo romper un silencio? Sé que es más fácil de lo que parece, pero es tan difícil...
Duele más un silencio que una mentira, no obstante...los dos duelen bastante.
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