"Siempre se puede hacer algo". INCOMPLETO
"Siempre".
Esta es de esas entradas raras, en las que no pretendo decir nada y quiero decir de todo. Los que lleváis un tiempo leyendo este blog ya sabéis lo que toca. Las interpretaciones son libres, y como pasaba en "Historias de príncipes..." todo parecido con la realidad es simple coincidencia, o no, depende de quien lo lea.
La verdad es que esta semana santa está siendo atípica. En parte me alegra, ya que no es siempre lo mismo. Por otro lado me entristece, porque echo de menos ciertas cosas. También me deja un mal sabor de boca, ya que pudo ser muy distinta y tal vez hasta más especial.
Al final ha pasado de todo un poco. Sinceramente, vuelvo a estar en ese punto en el que no sabes muy bien si estas feliz, triste, desmotivado, superado por los acontecimientos, depresivo, sobreexcitado, ilusionado, descolocado, con jetlag o cualquier cosa que pueda influir en tu actividad diaria.
A veces uno se levanta con ganas de comerse el mundo, aunque según avanza el día se va quitando. Otras veces te levantas con ganas de volverte a dormir hasta el 2341, aunque según avanza el día la cosa cambia. Y en alguna ocasión te levantas pensando "¿Que estoy haciendo?" y eso sí se queda haciéndote compañía todo el día.
No es fácil ser nadie en estos tiempos que corren, no es fácil ser tu, no es fácil ser yo, no es fácil ser alguien. Cada uno tenemos nuestras cosas, nuestros problemas, nuestras satisfacciones, nuestros sueños o metas, nuestros compromisos, nuestro estilo. No es fácil.
Tengo demasiado tiempo para pensar y eso me ayuda a escribir, el problema, es no tener claro como enfocarlo, como digerirlo y hacer que sea entendible. Escribir es fácil, si sabes como. Ideas sobran. Si has entendido algo, agradecería que me lo explicaras, si no has entendido nada, te agradezco el tiempo que has pasado aquí, en casos intermedios... Vuelve pronto.
Y recuerda, todo parecido con la realidad, puede ser que solo sea casualidad.
